jueves, 14 de mayo de 2009

Como fue que me convertí en maestro. 2da parte

A partir de ese día, continué apoyando a mis compañeros explicándoles las cosas que ellos no entendían bien en clases. Cuando terminé la carrera, tomé unos meses de descanso y luego empecé a buscar trabajo. Fue difícil encontrar un trabajo acorde al perfil con el que egresé de la universidad, sin embargo tuve la fortuna de encontrar uno, aunque no duró mucho. Luego de eso, conseguí trabajos que no tenían nada que ver con lo estudié: recepcionista de un hotel y como técnico de daños en una aseguradora.

Sin embargo, en esos trabajos tuve la oportunidad de enseñar a aquellos que no sabían mucho. Como recepcionista de un hotel, ayudé a algunos compañeros a hablar mejor el idioma inglés, y como técnico de daños, aclaraba dudas y enseñaba, tanto a clientes como a agentes de seguros, sobre los seguros de autos, casas, empresas, etc.

Todo eso hizo contribuyó a que cada día tuviera más interés en dar clases, ya sea de informática, de inglés o bien, como capacitador en seguros de daños. Comencé dando mis primeras clases de manera particular a niños, apoyándolos en la materia de inglés. Posteriormente, logré ingresar al colegio de bachilleres, donde actualmente laboro.

Como pueden darse cuenta, yo no estudié para ser maestro, pero el gusto por enseñar a los demás hizo que me convirtiera en uno. Sé que hay muchos maestros que quizá tuvieron una experiencia como la mía y que hay otros que desde un principio eligieron esta noble profesión. Me gusta ser maestro y espero serlo por mucho tiempo.

0 comentarios:

Búsqueda personalizada